El próximo gobierno regional y provincial debe comprometerse a salvaguardar la identidad arequipeña, refugiada en las pocas familias que quedan, así, la identidad arequipeña debe ser una prioridad y un eje fundamental en los futuros gobiernos de Arequipa para la convivencia entre migrantes y arequipeños, en ningún modo debe volverse elegirse ciudadanos peruanos y sólo los arequipeños deben dirigir la tierra que nos dejaron nuestros ancestros. Eso no quiere decir marginación del inmigrante ya que están en casi todas las listas a concejo municipal y regional, listas que demuestra una realidad. Para un dato hay menos de 100,000 arequipeños, con tendencia a la baja.